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        Revista Digital de El Quinto Hombre
 
           
       
         QUIEN SOY YO 
        
           
             
                  
                por Fabio Zerpa 
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      ¿Quién soy?, la gran pregunta. 
      Todos los seres humanos en algún momento de sus vidas 
        se lo han cuestionado. Todos los filósofos, religiosos o metafísicos, 
        han ideado hipótesis, conjeturas, opiniones, afirmaciones, pero la pregunta 
        sigue en pie. 
      Siempre decimos YO SOY... de tal o cuál manera, pero 
        es tan sólo una descripción. Pero el QUIEN SOY exige una explicación, 
        harto difícil. No basta con la identidad, ni con el "me llamo de tal forma". 
        El yo no siempre tiene el mismo significado. Cuando nos despertamos y 
        tenemos al lado a nuestra mujer, somos un Marido, que de pronto en pocos 
        minutos, al despertar a sus hijos, ya se convierte en Padre y a su vez 
        cuando toma el teléfono y habla con su madre, se convierte en Hijo, y 
        en cuanto llega a la oficina o a la industria se transforma en Hombre, 
        empleado, ejecutivo, publicista, industrial, etc. 
       
      
      ¿Cuál es el VERDADERO YO? En todas estas facetas, emociones, 
        pensamientos, alguien ha estado funcionando como un FACTOR FIJO Y SUPUESTAMENTE 
        INAMOVIBLE, una yoidad permanente. 
      La brevísima y tan significativa palabra YO, que me representa 
        a mí, sólo a mí, y no a ti ni a ninguna otra cosa, parece que tiene una 
        identidad firme y no transitoria. Yo no puedo nombrarte a ti, como yo, 
        porque sólo e indivisiblemente yo soy yo, y ese yo está rodeado de un 
        misterio tal, que vivimos pensando y meditando sobre él. 
      TAMBIEN SABEMOS MENOS DE NOSOTROS MISMOS QUE DE CUALQUIER 
        OTRA COSA EXISTENTE: como si el YO estuviese ahí, y solamente fuera el 
        espectador permanente de nuestra gran película vital. 
      Se da la paradoja de que el SER MÁS INTELIGENTE DE LA 
        CREACION es el ser MAS DEBIL E IGNORANTE FRENTE A LAS GRANDES PREGUNTAS. 
      El espíritu humano tiene dentro de sí mismo la revelación 
        de lo que busca y que aparentemente no encuentra. Todos conocemos, explicamos 
        y percibimos LA MENTE, pero muy pocos sabemos LA INFLUENCIA TOTAL QUE 
        TIENE EN NUESTRAS VIDAS. Quizás es allí, en la comunicación de la mente 
        individual con la mente total donde se puede descubrir el conocido "DE 
        DONDE VENIMOS Y HACIA DONDE VAMOS". 
      Aunque tratemos de soslayar nuestra vida con ACTOS FARAONICOS, 
        con progresos materiales o sentimentales, desconocemos que tal vez la 
        verdadera vida creativa del ser humano se encuentre únicamente en el CONOCIMIENTO 
        DEL YO. El tesoro más importante está allí y no en las escaramuzas materiales 
        para hallar el oro físico y los ascensos sociales. Pareciera que queremos 
        colocarnos arriba de la roca inamovible de lo material para contemplar 
        desde allí los misterios de la vida. Pero el primer viento, escasamente 
        huracanado, nos hace tambalear. Ese tambaleo viene junto con EL DOLOR, 
        pero el DOLOR-DOLOR, es el que nos plantea EL GRAN INTERROGANTE: ¿para 
        qué esta vida? ¿Para qué seguir fluctuando en ilusiones? Uno está supuestamente 
        arriba y de pronto lo han bajado hacia el más profundo de los infiernos. 
        Bendito ese dolor, porque a partir de él podemos darnos cuenta y empezamos 
        a MENTALIZAR LAS VERDADES. 
      Entonces nos acercamos al verdadero entendimiento de 
        las cosas, encontramos la razón de ser, de por qué hemos llegado hasta 
        el precipicio. Casi siempre en esos instantes, en ese minuto difícil y 
        definitivo, acudimos a religiones, sectas, filosofías, para que nos guíen. 
        olvidando que EL VERDADERO MAESTRO ESTA DENTRO NUESTRO. 
      
         
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             El enfrentamiento con EL GRAN MISTERIO DEL YO es 
              la única vía de solución a este dolor, representado por una crisis 
              emocional o sentimental, por una encrucijada vital o un dolor moral 
              o espiritual que siempre debe ser BIENVENIDO, porque en esta circunstancia 
              y a su salida, si nos damos cuenta, está LA LUZ. 
            Pienso que las respuestas a los más grandes interrogantes 
              del Hombre están en EL ESFUERZO COTIDIANO DE LA ESPIRITUALIDAD, 
              en la práctica espiritual, personal e indivisible, que acomoda y 
              reacomoda permanentemente el proceso interno del ser humano. 
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      Además tenemos una maravillosa y benéfica arma que es 
        la INTUICION, a la que damos tan poco importancia. Ella es la que nos 
        alerta de los grandes peligros, olfateando la maldad y los errores. Hemos 
        hecho un GRAN MONUMENTO A LA CIENCIA, la hemos colocado en el pedestal 
        de LO INAMOVIBLE, cuando nada es más móvil que la investigación, único 
        camino para desentrañar los grandes enigmas. 
      En la INTUICION está también EL HAMBRE ESPIRITUAL de 
        aceptar libremente, sin dogmas férreos, preestablecidos por intereses 
        muchas veces espúreos, el conocimiento, la admiración y la veneración 
        del misterio de los misterios, LA RELACION CREADOR-HOMBRE, el religare. 
      Por otra parte, podríamos decir que existe un YO FISICO 
        cuando estamos en el nivel consciente de nuestro accionar, un YO MENTAL 
        cuando nos dormimos, y olvidamos a ese YO FISICO y uno permanente que 
        es el YO ESPIRITUAL, que funciona como un ENTE CONSCIENTE que todo lo 
        controla. 
      Todos están ligados, unidos, interconectados. El alma 
        no sale fuera del cuerpo físico sino cuando se produce la muerte física. 
        La inteligencia no puede estar separada del cuerpo. la consciencia está 
        ahí junto a él sin liberarse nunca. 
      Cada vez más sabemos que EXISTE UN MUNDO NO MATERIAL, 
        QUE ESTA MAS ALLA DE LAS TRES DIMENSIONES Y QUE EL YO PUEDE FUNCIONAR 
        ALLI EN FORMA HARTO INTELIGENTE, INDEPENDIENTE DEL CUERPO. 
      Sabemos también que la ESENCIA DE LA YOIDAD ES EL ALMA, 
        la más sutil de las entidades, la parte actual de nuestro espíritu eterno. 
        El cuerpo es únicamente un instrumento físico que nos permite conocer 
        este mundo tridimensional, así como movernos en él. El traje de astronauta 
        que nos permite vivir en este plano físico. 
      LA SENSACION DEL YO PERDURA DENTRO DE NUESTRO CUERPO, 
        pero lo trasciende, está más allá. Lo más profundo y verdadero de la yoidad 
        debemos buscarlo en LA MENTE Y EN EL CORAZON. 
      Quizás allí se encuentre. Lo mejor para ti. 
      
       
El Quinto Hombre
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