Revista Digital de El Quinto Hombre

UN HOMBRE LLAMADO...

                                                  EL NOSTRADAMUS ARGENTINO



Reportaje exclusivo de FABIO ZERPA (Argentina)

 


Solari Parravicini
a los 25 años
Sí, el Nostradamus  argentino (así lo bauticé en 1970) fue, y es, Benjamín Solari Parravicini, con quien tuve una fluída amistad desde 1968 hasta su muerte sucedida el 14 de diciembre de 1974; me dejó un gran legado, profecías suyas (nuevos aciertos, por supuesto), de puño y letra, así como experiencias psíquicas suyas, de las muchas que tuvo, que guardo en una incunable, valiosísima y querida carpeta de tapas negras, que él mismo me obsequiara.

¿Cómo lo conocí? Protagonista de un caso ovni. En 1968 me habló su otro amigo, Rafael Squirru,  de su experiencia con una nave extraterrestre, en pleno centro de Buenos Aires; acicate para nueva investigación.

Esto fue lo sucedido en una fría, lluviosa y neblinosa noche del mes de Julio de 1961, que pude analizar profundamente.
Una madrugada venían caminando por la calle Tacuarí, Pelón (su sobrenombre, que desde chiquito lo acompañó, como característica a los hijos mayores de fines de siglo XIX, no por su pelada que luego él iba a usar con sus consecuentes afeitadas del mediodía) con su gran amigo de los últimos 30 años, Genoroso Ruiz Idarraga, que fuera encargado de  la casa de apartamentos donde viviría los últimos años el gran vidente argentino y que lo supo cuidar, él y toda su familia, con una atención  realmente ejemplar.
Al cruzar la calle Venezuela se vieron enfrentados por dos individuos rubios, muy altos, con ojos de un extraño color celeste blanquecino; estos les dirigieron la palabra inintilegiblemente: ambos quedaron asombrados; se excusaron porque no entendieron nada y muy estupefactos continuaron su camino para doblar en la calle Méjico y entrar en su casa.
Evidentemente, un poco sonrientes y miedosos por lo que había sucedido, hicieron comentarios sobre la situación, el lenguaje extraño y la vestimenta de los personajes raramente brillante; ambos quedaron con la impresión  que estos hombres eran de alguna secta extraña o extraterrestres, ya que en ese año hubo una prolífica oleada ovni en la Argentina, con notorios contactos del tercer tipo. También les quedó una sensación de sentirse impregnados de una energía muy especial, cósmica o trascendente, asi como con un nudo en el estómago, realmente muy especial, a posteriori del miedo inicial.

Unos  quince días después,  aproximadamente, ocurre otro hecho; esta vez sólo a Solari Parravicini, ya que él regresaba de una cena en un restaurante típico español en la Avenida de Mayo; venía caminando por la avenida 9 de Julio, la central de Buenos Aires, que terminaba en el edificio del Ministerio de Salud Pública, actual de Acción Social, y que ha quedado al medio de la avenida más ancha del mundo, en el cruce con la calle Moreno.

Pelón se siente sensiblemente fatigado y aunque le faltaba poco para llegar a su departamento, se sienta en un banco  para relajar sus músculos y poder contemplar, como a él le gustaba, las estrellas, en aquella noche tan clara y hermosa. De pronto, dos seres de ojos blanquecinos (parecidos o iguales a los anteriores) se le acercan y una enorme como potente luz lo envuelve, para encontrarse, en segundos, en una amplia habitación circular,  dentro de un silencio total y sintiéndose él muy bien, quizá hasta eufórico.

Esa sala tenía una serie de paneles luminosos y un raro tubo central de aproximadamente un metro de diámetro, alrededor del cual se movían varios individuos (no supo precisar cuántos, pero calculó unos diez) que no hablaban; a pesar de ello Pelón captó mentalmente la indicación de que mirara por la ventanilla (o escotilla) que tenía enfrente.

En ese momento, se bajaron las luces amarillas internas y en la negrura externa consiguió divisar determinados reflejos luminosos asi como bultos, que él pensó eran ciudades vistas desde arriba; escuchó en ese momento en su cabeza  "ES CRISTIANIA", comprendiendo que era el nombre que esos seres le daban a nuestro planeta.

Un ser muy alto, espigado y sonriente  (similar al caso MARIA ELODIA PRETZEL, en Villa Carlos Paz, Córdoba, Argentina, internándose en un motel) se acercó a él. Entendió que era quien le hablaba telepáticamente (Contactos del Quinto Tipo de la Ovnilogía), le volvió a expresar "DEBES PREDICAR EL AMOR. EL UNIVERSO ES ARMONIA. LA CONDUCTA DE USTEDES ES MUY AGRESIVA Y PELIGROSA. LOS ESTAMOS OBSERVANDO. TENEMOS MUCHOS ELEGIDOS. VOLVEREMOS A ENCONTRARNOS". Filosofía que iba a reflejar en muchas psicografías posteriores.

Sintió mucho frío; el poco viento de aquella noche le helaba el rostro; era invierno y estaba de regreso en su banco de la avenida 9 de Julio, viendo que el amanecer empezaba a surgir sobre la ciudad. Miró su reloj eran las seis y cuarenta. Desde las tres y diez, cuando se sentó en el banco, habían pasado mas de tres horas y no se había dado cuenta. Sabía que no había sido un sueño; todo había sucedido como en el cine, secuencia tras secuencia, pero sin continuidad, como si  hubiera tenido amnesias parciales. Recordó con mas fuerza a aquel ser y sus palabras; el golpear de sus manos en la baranda de aquel "salón" repitiendo "CRISTIANIA, CRISTIANIA, CRISTIANIA".

Oyó a la lejanía, la sirena de un camión de bomberos; semidormido miró hacia delante y vió un camión de reparto incendiándose con gente alrededor asi como un toldo de panadería que estaba en la vereda de enfrente; pensó que todo había sido producido por la luz potente que le había sacado de su banco y luego lo había traído a allí; su sueño había sido realidad.

Se levantó, caminó las pocas cuadras hasta su domicilio, lo encontró a Generoso que estaba limpiando la entrada, quien lo vió muy desencajado "Esta noche hablaremos,  ahora quiero dormir". Y lo hizo, nada menos que durante veintiseis horas, con el cuidado, por supuesto, de su amigo y su familia.

Como hacemos en todas las investigaciones, lo interrogué muchas veces a la manera policíaca, para ver si tenía contradicciones en su relato; siempre reiteraba las mismas palabras y hechos; yo dudaba ante un hecho tan insólito de una nave extraterrestre en pleno centro de Buenos Aires y también que podía ser un suceso paranormal a los que nos tenía habituados este gran profeta; pero el incendio existió y otra persona, que caminaba por la avenida 9 de Julio en sentido contrario, nos relató que vió un enorme haz de luz compacto y coherente, que como fogonazo, apareció al lado del edificio del Ministerio.

Así lo conocí a mi amigo Pelón. Pero yo podría hablar mucho sobre este personaje tan singular pero cité para que me diera más detalles de la vida íntima de él, a su hermano menor, el otro amigo, JUSTINO SOLARI PARRAVICINI; un excepcional caballero, con una clase que denota su alcurnia, dueño de una sencillez y humildad, de un hombre que tuvo mucho dinero (para ambos hermanos es igual) y ahora es un jubilado más de Argentina. Justino, fue periodista, editó una revista, cuyas tapas humorísticas se las hacía Pelón; en su ostracismo marplatense  fue redactor y editorialista de un importante diario "LA MAÑANA"; escritor de poemas y cuentos, autor de una biografía sobre su hermano, "FUE PROFETA EN SU TIERRA", que se publicará dentro de poco tiempo; una persona realmente encantadora.

El nacimiento y su vida. Benjamín Solari Parravicini nació en la calle Beruti, una quinta de Buenos Aires, hoy pleno barrio de Palermo. Era el  8 de agosto de 1898; luego se mudaron a una casa en la calle Córdoba 1323, en donde se empiezan a forjar las primeras psicografías de Pelón, cuando una fuerza desconocida, imperiosa, se apoderaba de él y su mano  era dirigida; no entiende cómo ni por qué; al principio, se angustiaba mucho, pero después se acostumbró. Cuando yo lo frecuentaba, estábamos charlando y de pronto veía sus ojos un poco extraños; me decía: "Me permites, Fabio, un momento". Se lo notaba en trance, tomaba o aportaba parapsicológicamente  un lápiz,  dibujaba y escribía, para producir inmediatamente una nueva psicografía.

Los padres de los Solari fueron BENJAMIN TOMAS SOLARI, médico psiquiatra, profesor en la Facultad de Medicina de Buenos Aires y diputado nacional, nacido el 7 de marzo de l867. Se casó con DOLORES PÀRRAVICINI, que había nacido el 29 de diciembre de 1875, en LA CASONA, la famosa residencia de Vicente López, que tanto quería y admiraba Pelón, adonde llegó a tener una granja que malamente explotó. Esa residencia palaciega había sido adquirida por el bisabuelo de los Solari Parravicini, nada menos que al marido de la célebre MARIQUITA SANCHEZ DE THOMPSON, la que fomentó el Himno Nacional Argentino. También Dolores fue prima hermana de ese genio de la actuación en la Argentina, que fue FLORENCIO PARRAVICINI, que tanto admiró Pelón y en el cual quizá mucho se inspiró para hacer sus memorables dibujos de payasos y clown, avivado posteriormente por su amistad con el famoso payaso Frank Brown.


La hermosa casona de Vicente López donde
fue chacarero en una etapa de su vida

El primer hijo del matrimonio fue Benjamín, ya bautizado enseguida como Pelón, siguiéndolo María Cornelia, Maria de las Mercedes, Luis María, Dolores, Emilio, Maria Antonia y Justino Jacobo Pablo que nació el 29 de agosto de 1917, es decir, con una separación de diecinueve años, que a pesar de ello, hubo siempre una admiración, un afecto, asi como una muy sugestiva comunidad emocional entre los dos hermanos; quizá el mayor lo hizo "compinche" al menor.


Con una de sus novias, la srta. Susana Bernardo Massini

El arte, la música, su generosidad. Justino recuerda que en su adolescencia y juventud a ambos les gustaba la noche; el mayor influenciaba al menor, y así iban a todos los cabarets de la calle 25 de mayo o del barrio de la Boca; además, Pelón era muy buen pianista teniendo un gran sentido musical que lo llevó a dominar muchos instrumentos; Justino tocaba bastante bien el acordeón y en todas las reuniones sociales eran el centro de las mismas porque ambos tenían un gran sentido del humor; otra característica de nuestro profeta, por aquellos años, era que se disfrazaba con gran asiduidad, sobre todo para las fiestas de Carnaval; era famoso por sus humoradas

Benjamín ya empezaba su notoriedad como pintor sobre temas gauchescos; el hombre y la Pampa los reflejaba extraordinariamente bien, con una gracia y humor que sería el antecedente del otro gran pintor argentino MOLINA CAMPOS; además siendo Justino director de una revista, las tapas humorísticas las hacía su hermano mayor, que tenía a su vez una sección ALFREDO Y FREDITO, en la cual hacía comentarios y chistes alemanes, sobre estos dos personaje, que reflejaban la psicología del padre de los Solari Parravicini, bastante autoritario y otro hermano, que vivía en el campo, y motor de muchas bromas por su flacura.

La pintura de nuestro hombre trasciende fronteras y tiene premios en exposiciones de Lieja y París, en plena Europa, así como lo lleva a ser Director de Arte y Ayuda Social del ex Banco Municipal de Préstamos donde empieza a manifestarse el ser solidario que había en él y que lo hicieron destacarse por ello en la sociedad bonaerense de aquellos tiempos.

Llega también a especializarse en realizar magníficos payasos con la inspiración de su amigo Frank Brown, notorio cirquero criollo y su tío Florencio, que se destacaba con esas características actorales que lo hicieron famoso en el teatro, radio y cine argentinos

Su creatividad musical lo llevó a componer muchos tangos y ritmos del jazz, que directores como Francisco Canaro, Juan Carlos Cobián y Francisco Lomuto, plasmaban en sus orquestas: Muchos de sus tangos los daba a esos intérpretes sin cobrar un solo centavo y así pasó con muchos cuadros  y artesanías suyas.

Sus fracasos comerciales y el inicio de sus manifestaciones paranormales. En varias oportunidades tuvo negocios en que el fracaso comercial siempre tuvo presente, porque no lo interesaba "la plata", como él decía, a pesar que se dedicaba a "vender" sus realizaciones artísticas; su artesanía innata, lo llevó a plasmar biombos y calaveras, muy reconocidas por  la gente de la época durante varias décadas. Hasta fue chacarero en la famosa residencia veraniega, que él tanto quería., La Casona. Era un hermoso palacio dieciochesco.

Desde la adolescencia, sentía algunas manifestaciones indefinibles, ajenas a su voluntad y sin saber el origen de tales percepciones. Justino recuerda que a fines de la década del 20, teniendo ya Pelón unos 30 años, un amigo de la familia,  Dr. Anzó Quintana, que padecía arterioesclerosis  avanzada, de pronto una mañana había desaparecido repentinamente.

Salen a buscarlo en el auto, el padre y los dos hermanos Solari Parravicini, guiándolos nuestro paranormal hacia una plaza del barrio de Belgrano, porque intuía que estaba sentado el desaparecido en una plaza con una iglesia y un club enfrente; pensando que podía ser en el barrio de Belgrano, donde hay un sitio de esas características, buscan y no hallan nada.

Entonces, por indicaciones de Pelón, se dirigen unas 30 cuadras más hacia el norte, ya pasando el perímetro de Buenos Aires e internándose en el Gran Buenos Aires, en la ciudad de Vicente López; de pronto en  una avenida, pide el paragnosta doblar hacia la derecha, llegando así a la plaza central de ese lugar, cerca de la estación de ferrocarril; rodean el mismo y allí, en la plaza, sentado en un banco, muy lejos de su casa, estaba el Dr. Anzó Quintana. Soportando las bromas de los otros testigos, Pelón se ríe muy contento, pensando todos en la casualidad y no en el signo de precognición y quizá telepatía, que ya estaba demostrando desde hace años nuestro protagonista; un Gerard Croiset, el gran paranormal holandés estaba entre nosotros.

También en La Casona empiezan a suceder muchos hechos de fantasmas y paranormalidad; pero es en la casa paterna de la calle Córdoba donde sucede otro hecho significativo de las condiciones de percepciones extrasensoriales que lo tendrían de gran protagonista durante más de la mitad de su vida.

El gran primer hecho notorio, que recuerda Justino, fue cuando se escuchó un gran estrépito en el dormitorio de Pelón en plena madrugada; él entra nervioso al cuarto de su hermano con una lámpara, que minutos antes había encontrado perfectamente intacta, viéndosela hecha añicos, con desgarrones en todo el aparato; él narró que estaba leyendo una novela, mira hacia donde estaba la lámpara, viendo como ella se eleva, apagándose enseguida y estrellándose contra la pared, con gran estruendo. Evidentemente, clásico fenómeno parapsicológico de psikappa, llamado poltergeist, producido por la mente que moviliza la materia; hay una veintena de diferentes tipos de estos fenómenos y miles de casos en el mundo entero.

Después de ese suceso, el profeta empieza a recibir, en soledad, de noche y a través de su mano que se moviliza sola, como si fuera un mandato; de esta manera llegaba hasta el amanecer del día siguiente; estas características van a suceder en el resto de su vida.

La mayoría de los mensajes se referían a la futura Segunda Guerra Mundial, que aún no se había declarado; eran los años 1934,35,36. Justino recuerda que quizá su primera psicografia, que realizó y se cumplió, fue el dibujo del dictador Benito Mussolini, colgado de los pies, ocho años antes que el 29 de abril de 1945 cuando el Duce es apresado por guerrilleros, lo fusilan y lo cuelgan en una plaza pública con su cabeza hacia abajo.

El primero de mayo de 1945 se suicida Adolf Hitler y su mujer Eva Braun en el bunker de la Cancillería de Berlín; en julio de 1938; Pelón dibuja la imagen de los dos dictadores (en aquel año nadie pensaba la terminación tan trágica de los dos) atados a un poste, de espaldas; Mussolini con su cabeza inclinada sobre el pecho, recién fusilado; el alemán, mira de frente con un resabio de desafío; en el lado izquierdo se lee "Con el mismo fin, el mismo fin". Realmente una extraordinaria profecía.

Y así sigue hasta prácticamente su muerte con sus dibujos premonitorios, que están reflejados en las ediciones de la revista CUARTA DIMENSION, (décadas del 70 y 80). en los libros de Sigurd Von Wurmb y Pedro Romaniuk, a los cuales se puede acceder a través de nuestra Librería On Line y en las secciones de Profecías y Parapsicología de nuestra revista digital EL QUINTO HOMBRE.

A mí me sigue impactando esa psicografía hecha en 1939, que publicáramos en nuestra revista CUARTA DIMENSION, en la cual se ve la Estatua de la Libertad dividida en dos, con edificios caídos llenos de polvo, con una leyenda muy significativa sobre los Estados Unidos, y que recuerdan el suceso del 11 de setiembre del 200l, 62 años después de la predicción. Increíble, increíble; y que tanto le impactó a la famosa periodista cubano-norteamericana, Cristina Saralegui, cuando me llamó para su programa EL SHOW DE CRISTINA" cinco días después del episodio de LAS GEMELAS, ya que en el 2000 en otro programa le había vaticinado que sucedería "Una gran bisagra histórica para el 2001"

De pronto también recuerdo su insistencia en LA HORA DIEZ, y el hecho de Las Gemelas fue a las 10 horas de Greenwich; nos preguntamos ¿cuándo vendrá la hora 11 y la 12? Y ese Hombre de gris que cambiará la Argentina a partir del 2002; yo que dudaba de esa afirmación, empiezo a encontrar su razón cuando el 19 de diciembre de 2001 se despertó esa clase media argentina, como nunca lo había hecho desde mayo de 1810; ahí está ese "hombre" que cambiará a la república "argentia", la de la plata, la del río marrón como mar, la samaritana del mundo, como anunció Pelón.

Allá, por la década del 70, hice un documental sobre el Nostradamus argentino, en el cual  se demostraban más de 200 aciertos en sus dibujos premonitorios y que el público admiraba sonriendo así como esperando, también, que se cumpliera el futuro tan promisorio que él adivinaba para América toda.

Solari, 3 meses antes de morir

Pero algo poco conocido de Benjamín Solari Parravicini son sus APOTEGMAS, reflexiones que indican mucho su pensamiento. Vamos a reproducir algunas que están  en poder todavía de su hermano Justino

1-     La caridad de algunos no es más que una forma de soberbia
2-      El progreso sin moral prepara la decadencia.
3-     A los 20 años el hombre hace lo que quiere con la vida. A los cuarenta quiere la vida que hace; y a los sesenta hace lo que quiere la vida (Muy tipo Bernard Shaw)
4-     Si el hombre transita por la huella de la seguridad, únicamente, es obvio que no podrá trazar su propia huella.
5-     Si se piensa que hace millones de años ya existía la computadora cerebral, el órgano de la visión, etc., las teorías científicas provocan una sonrisa.
6-     La decadencia senil se nutre del miedo a la ancianidad. La juvenil, del miedo a la responsabilidad.
7-     Algunos al perder la Fe no se molestan en recuperarla. Les resulta más cómodo tratar de justificar la pérdida.
8-     La soledad agudiza los sentimientos individuales. Por ello, purifica o embrutece.
9-     El peligro de los triunfos materiales es que marcan el comienzo de los fracasos espirituales.
10- Quien no aprende a vivir, muere todos los días. 

Con este decálogo pienso que es suficiente, pero hay mucho más que en su libro "FUE PROFETA EN SU TIERRA" Justino Solari Parravicini lo muestra, para saber la enorme sabiduría de su hermano, un hombre de mucho carácter, de gran personalidad, pero de una gran versatilidad artística que dejó para la Humanidad toda, estas PSICOGRAFÍAS, grafismos de una mente prodigiosa, que evidentemente demostraban su extraordinaria capacidad paranormal. Yo que he estudiado tan profundamente a cantidad de testigos paranormales, tanto en América como en Europa, creo que mi amigazo Pelón fue un ser excepcional, que no dejó discipulos (él nunca lo quiso porque decía que "Así se forman fanáticos"), pero si dejó ejemplos notorios para la gente joven, que él tanto admiraba, y abriendo el camino de la espiritualidad, que sin ninguna duda, transitaremos definitivamente en este siglo XXI, en el cual haremos LA REVOLUCION DEL CONOCIMIENTO.

Gracias, Pelón, por todo lo que nos diste y nos sigues dando. Gracias por estar, a ti, futuro hombre spiritualis, la meta a cumplir del semejante que tanto amaba mi admirable amigo.


Estancia en el Uruguay en la cual siempre se refugiaba


Con sus cuadros de payasos

Con un amigo de andanzas nocturnas

 

DOS DE SUS MUCHAS EXPERIENCIAS PARAPSICOLOGICAS DADAS DE PUÑO Y LETRA A FABIO ZERPA

 

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