Revista Digital de El Quinto Hombre

CARTA ABIERTA DESDE MADRID:
"GRACIAS ARGENTINA, MÉXICO, VENEZUELA, ECUADOR, PERÚ, CUBA…"



por Nina Llinares (España)




De todo corazón, gracias a todas las personas que desde México, Argentina, Venezuela, Perú, Ecuador y todos los demás países latinoamericanos han escrito solidarizándose con este dolor.
Necesitaba escribirle esto a cada uno de ustedes y antes que nada decirles que les quiero a cada uno de ustedes.
Ya saben que por mi trabajo he tenido el privilegio de conocerles personalmente a la gran mayoría de ustedes, y siempre me sorprende el hecho de que nos quieran tanto a los españoles…con tanto daño como hicimos en sus países…eso es una muestra más del amor, sabiduría, nobleza y conciencia que Latinoamérica tiene y de la que Europa y los demás países debemos tomar como ejemplo.
El día 11, muy temprano, como cada día, me encontraba trabajando frente a mi computadora cuando sentí el impulso de prender el televisor.
Las imágenes eran terribles, caí de rodillas frente a la pantalla invocando la ayuda de los 7 Arcángeles de las Órdenes Solares. No oía, sólo veía…veía imágenes que ya han sido censuradas por lo bárbaras…brazos, piernas, cabezas…luego las taparon con telas por respeto…
Lo fuerte fue darme cuenta de que se trataba de mi país, de que se trataba de Madrid, de que se trataba de una estación, Atocha, por la que paso cada fin de semana, pues por mi trabajo viajo cada fin de semana, y mi medio de transporte es el tren.
Ya en la noche, lo más duro fue ver imágenes de Latinoamericanos que no podían ir a ningún lugar a preguntar por sus seres queridos, PUES NO TENÍAN PAPELES LEGALES Y TENÍAN MIEDO.
Doce de los muertos eran Latinoamericanos: peruanos, ecuatorianos, colombianos…ahí sí que lloré más que nunca, porque no comprendo, no entiendo cómo siendo HERMANOS tengamos que tener permisos legales para poder vivir donde queramos. No comprendo cómo, en nuestros días, todavía siguen existiendo las fronteras raciales; no comprendo cómo las personas no tenemos una sola categoría: LA HUMANA, sin más distintivos.
El poder político reaccionó: el colectivo notarial pidió al gobierno tramitar (gratuitamente) la legalización de los fallecidos y sus familiares inmediatamente.
El jueves, el viernes, el sábado…los ciudadanos estábamos sobrecogidos y las calles en silencio, ni un bocinazo, ni un grito…sólo lágrimas…En Madrid, la gente lloraba en sus autos cuando manejaban, en las calles, en los colegios…a todos nos salían las lágrimas sin esfuerzo…Este dolor es muy especial pues a esa hora en que ocurrió la barbarie, sólo viajan: niños que van a sus colegios, mujeres embarazadas (han muerto varias) que van a la seguridad social para no hacer colas, trabajadores de la capa social menos privilegiada, universitarios que van a sus facultades…y todos ellos, los muertos (200), los heridos (casi 200) y los mutilados…se lanzaron en su día a la calle pidiendo la paz, rechazando la decisión de nuestro presidente Aznar de involucrar a España en la guerra de Irak. Los españoles queremos LA PAZ EN EL MUNDO.
Yo sabía que no podía haber sido ETA, porque los terroristas de ETA suelen sembrar el pánico avisando que han puesto las bombas…la barbarie era de seres sin corazón, de auténticos monstruos poseídos por el mal: quien ha hecho esto ya no es humano, está poseído por fuerzas muy oscuras.
Tengo un hijo de 13 años, en plena pre-adolescencia, que jamás había vivido algo tan duro…lleva varias noches durmiendo conmigo pues es por la noche cuando llora desconsoladamente y repite como un mantra: cuantas familias rotas mami, cuantas mamás sin sus hijos mami, cuantos hijos sin sus papás…Ha asistido por primera vez en su vida a dos manifestaciones multitudinarias y se sintió mucho mejor; gritó, condenó, pidió un MUNDO DE PAZ Y SOLIDARIDAD, pues como todos nuestros niños, lo merece, es su derecho y el nuestro, el de toda la Humanidad.
Les pido a todos ustedes que cuando tengan tiempo le echen un vistazo a este trabajo-denuncia que han hecho 32 directores de cine, a los que el Gobierno silencia y los tiene bajo punto de mira por ser claros y directos, por decir la verdad. Cada uno de estos cortometrajes, de 3 minutos de duración cada uno, refleja la REALIDAD DE ESPAÑA, lo que no muestran en los noticieros, el momento en el que vivimos y nos encontramos.
Gracias de nuevo por su amor, por su HERMANDAD, y ya saben que están en mi corazón.

El Quinto Hombre