Revista Digital de El Quinto Hombre

   
EXCLUSIVO PARA EL QUINTO HOMBRE
DESAPARICIONES

Por DR. LUDWIG SULLOS

 

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   Muchas veces sucede que un objeto desaparece. A veces, con suerte, reaparece en el mismo lugar. A veces reaparece lejos del lugar de la desaparición. Y a veces nunca reaparece.  
   La gente tiende a atribuir estas desapariciones a los más diversos motivos, hasta a duendes. Pero hay clases especiales de desapariciones que se pueden atribuir al hiperespacio. ¿Cómo es eso?

   Imagine el lector que viene un tripulante en una nave espacial de un mundo de tecnología muy avanzada. Llamémoslo "V" (de visitante). En su mundo manejan el hiperespacio, que es la cuarta extensión del espacio, o sea, la cuarta dimensión.
   ¿Qué es la cuarta dimensión? No confundir con la idea de que es el tiempo, que en la física del siglo XX llaman "cuarta dimensión".
   Aquí debo repetir parte de lo que figura en una publicación anterior de esta misma sección (EL EXPERIMENTO FILADELFIA)

   Se trata estrictamente de la geometría del espacio. Una dimensión es una línea. O sea, una línea tiene una sola dimensión: largo. Desplazando la línea en sentido perpendicular a sí misma, se obtiene un plano, que ya tiene dos dimensiones: largo y ancho. Desplazando el plano en sentido perpendicular a sí mismo se obtiene el espacio, que tiene tres dimensiones: largo, ancho y alto. Hasta aquí es trivialmente simple y comprensible. Es visualizable.
   Desplazando el espacio perpendicularmente a sí mismo se obtiene el espacio 4-dimensional que llamamos "hiperespacio"…  pero ya no lo podemos visualizar. Para que se pueda explicar, es necesario crear un concepto similar, dando un paso atrás, o sea, una dimensión menos.

   Imaginemos un mundo de dos dimensiones (2D; D = dimensión), un plano. Para mayor comodidad, imaginemos una mesa plana, extensa. Sobre esta mesa ponemos disquitos, como monedas, simulando los átomos de este mundo. Estos "átomos" solo pueden moverse en dos dimensiones, sobre el plano de la mesa, porque están sujetos a la misma por un campo de fuerza; pueden moverse, pueden chocar entre ellos, reaccionar. Pueden formar vida biológica y albergar conciencias (almas) que sentirán este mundo 2D como normal, pudiendo visualizar solo dos dimensiones (largo y ancho solamente). No tienen noción de que, en realidad, sus átomos tienen espesor también, que se extienden en la tercera dimensión (3D). Nosotros, los seres tridimensionales, sí lo visualizamos, pero ellos no. Para ellos los objetos (hechos de átomos-disco) son objetos tangibles que se mueven en dos dimensiones, sobre el plano de la mesa.

 

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   Si levantamos un objeto de este mundo de 2D por encima de la mesa, para ellos este objeto "desaparece". Lo podemos desplazar y colocar de vuelta a la mesa y para ellos "reaparece". Así funciona una desaparición hiperespacial.
   Claro está, nuestro amigo V no necesariamente es un ser de 4 dimensiones. Pero sabe fabricar vehículos que pueden moverse hacia el hiperespacio, "salen del espacio normal" y se deslizan por un espacio paralelo y adyacente al espacio normal; dispone de un sistema de propulsión en tal espacio y un visor para observar nuestro espacio normal. Él tampoco puede visualizar la 4D; cuando sale del espacio normal, él de pronto deja de verlo, pero conecta el visor. También puede abrir un "puente" entre los dos espacios 3D (el normal y el paralelo en que está su nave), tomar objetos y llevárselos en su nave.
   Si un terráqueo que nada sabe del hiperespacio ve desaparecer así un objeto, se asusta mucho. Cree que son fantasmas, o que está viendo visiones, se volvió loco, etc.

   V se cuida de no asustar a los terráqueos (una ciencia tan avanzada debe ser paralela a una ética avanzada… así espero…).  Así, V puede observar la vida íntima de cualquier terráqueo, puede asustarlo si quiere, puede llevarse al mismo terráqueo también, y hasta puede curarlo si se enferma. Han habido muchas curaciones no explicadas. No quiero desmerecer las curaciones milagrosas como las de Lourdes, pero se supone que en el mundo de V la medicina también está muy avanzada. Una esperanza mía supone que la ética médica de V excluye el concepto terráqueo de que "cuánto más sufre el enfermo, más paga" (pido perdón de los buenos médicos, quienes también odian este concepto), y que en el mundo de V no existe el dinero.

   Pero… si V es moralmente parecido a nosotros, también puede "deslizarse" dentro de un depósito de bombas, introducir un detonador y volar la zona. Si V fuera malvado, no tendríamos ninguna defensa contra él. No obstante, yo creo que hay una especie de "policía cósmica" que cuida de los mundos primitivos, como nosotros cuidamos las reservas naturales contra, por ejemplo, los cazadores furtivos. Bueno, espero que sea así. Pero ya ha habido muchas explosiones e incendios inexplicables. Para V, matar una persona es muy fácil: le calienta el bulbo raquídeo a 60 grados; o le introduce un veneno en la sangre. Estas cosas horribles salieron de mi mente salvaje. Es que yo estoy dentro de un cuerpo humano terráqueo y a veces me cuesta dominar el monstruo genético que hay en mi cerebro.

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© Imagen: “2001 odisea del espacio”, Stanley Kubrick - MGM

 

   Por suerte, en la Tierra no conocen el hiperespacio; mejor no imaginar el uso que le darían. (Mis superiores espirituales seguro que leyeron lo del EXPERIMENTO FILADELFIA; creí que me iban a matar por divulgar información científica clasificada; pero todavía estoy vivo; no los comprendo…)

   Lo descrito hasta aquí se refiere a los OVNI(s) que visitan la Tierra. Puede ser con fines científicos o por simple turismo interestelar. Pero las aberturas hiperespaciales pueden generarse en la naturaleza también. Hay lugares especiales en la Tierra donde desaparecieron muchos objetos, inclusive aviones y barcos. Por ejemplo, el Triángulo de las Bermudas es uno de los sospechosos. Si está hecho en forma artificial o es natural, no lo sé. Pero hay muchas desapariciones documentadas. Hay dos lugares en la Tierra donde han habido muchas desapariciones: en los polos geográficos. Puede ser debido al movimiento de una masa grande (la Tierra misma). Parece que el movimiento de una masa genera un campo que, en cierto modo, estabiliza los objetos en el espacio normal. El vector de estabilización se anula en el eje de rotación. El lugar exacto debe moverse debido a la influencia de otros planetas, en especial la Luna. Tal lugar es una zona de "espacio flojo" donde un pequeño empuje puede mover objetos no solamente en 3 dimensiones, sino también en 4.

   Se han documentado casos de desapariciones delante de la vista de muchas personas, no solamente en los polos sino en diversos lugares del planeta. Ver desaparecer una persona es algo impactante. Pero a la desaparición de objetos pequeños se da poca importancia.
 
   Yo personalmente sé de algunos casos. Describo dos para dar un ejemplo. Uno es el caso de una chef que trabajaba sola; preparaba 5 muslos de pollo; los tenía en una bandeja. Se dio vuelta por un segundo y al volverse para tomar los muslos, la bandeja estaba vacía. El otro caso es el de una hamaca del tipo de una tabla colgando de una soga en cada extremo. En una de las sogas estaba atada una cinta roja. La persona que se hamacaba la tocaba con la mano derecha. Detuvo la hamaca por un instante, se bajó, y volvió a subir… y la cinta estaba del lado izquierdo. Parecen casos triviales, hasta causan risa para algunas personas. Si desaparece un ómnibus con 50 personas, lo comenta todo el mundo durante una semana. Si desaparecen 5 muslos de pollo, no le importa a nadie. Sin embargo, el mecanismo puede ser el mismo para ambos casos. Esas desapariciones de objetos "sin importancia" suceden a menudo y le pasó a muchas más personas de lo que la gente cree. Es que no le dan importancia y lo olvidan, o se ríen.

   Se descartan las desapariciones hechas apropósito por magos de salón, quienes guardan muy bien sus secretos técnicos. Hay gente que piensa en que son realmente magos, que dominan leyes de la Naturaleza que los demás desconocen y ellos las usan para sus propósitos. Pero me parece muy difícil que un mago de salón use un equipo de 1022 kilovoltios, voltaje mínimo necesario para acceder al hiperespacio; al menos, es la única forma que yo conozco; debe haber otras.  

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   El avance de la ciencia es siempre por sorpresas. Algún día dominaremos la tecnología hiperespacial; y enseguida fabricaremos armas con la misma. (Y después de la guerra, solo dominaremos la tecnología de fabricar hachas de piedra…) Si se puede hacer desaparecer un objeto, y luego hacer que reaparezca en el lugar deseado, tenemos un recurso tecnológico valioso. Lo obvio es usarlo para transporte de carga y pasajeros. Será un fabuloso recurso para viajes, incluso interestelares; entonces nosotros seremos en otros mundos como el V malvado.

   También servirá para generar energía. Imaginemos una rueda pesada. Hacemos que la mitad rote al hiperespacio donde no hay gravedad y reaparezca en donde sí la hay. Esta rueda, conectada a un alternador, la hace girar y da electricidad gratis. Y muchas otras cosas  más. Por ejemplo, el manejo hábil del hiperespacio sería de gran ayuda en la cirugía. Un tumor cerebral, por ejemplo en la silla turca, inaccesible sin cortar partes importantes, se extraería sin lastimar zonas circundantes. Un parto difícil se reduciría a un simple movimiento hiperespacial y el bebé estaría afuera con placenta y todo.

Por otra parte, en un derrumbe, los atrapados se recuperarían con facilidad. Los ladrones con un equipo adecuado no tendrían que trabajar penosamente abriendo puertas blindadas. Estos equipos serían ideales para los asesinos. Y bueno, supongo que habría equipos de defensa contra los malvados, como por ejemplo rodear la caja fuerte con un blindaje eléctricamente polarizado. Aunque este blindaje sería complicado aplicarlo a una persona.
   En resumen, los equipos de moción hiperespacial convertirían al mundo en un paraíso y, a la vez, en un infierno. 

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   Y ahora, pensando en grande; ¿Sería posible que todo un planeta haga un salto hiperespacial, desaparezca de su órbita y reaparezca en otra parte del espacio? No me atrevo a decir que es imposible; para nuestra tecnología todavía está muy lejos. Pero quizás suceda a veces en forma natural. Que hasta ahora no lo hemos visto suceder es comprensible. Es que solo vemos los planetas de nuestro sistema solar, que son pocos. Si en otro sistema solar, incluso cercano, sucede algo así, aún no lo podemos ver. Espero que no ocurra aquí, en especial con la Tierra. Tampoco sería agradable ver aparecer, de repente, un asteroide de 100 kilómetros de diámetro a la distancia de la Luna con derrotero de colisión con la Tierra, sabiendo que en tres horas habrá aterrizado.

   No sé qué otros tipos de desapariciones existen. Debe haber muchos más. Estoy seguro de que no agoté todas las posibilidades. Solo agoté mis ideas, excepto una: qué desagradable sería si, habiendo cobrado una suma grande en el banco, de pronto desapareciera de mi bolsillo. Pero hoy existen técnicas (y expertos) que pueden hacerlo sin recurrir a la tecnología hiperespacial.